Lavavajillas de cúpula o lavavajillas de arrastre: ¿cuál elegir para tu negocio de hostelería?

El lavavajillas de cúpula —también conocido como lavavajillas de capota— es uno de los modelos más comunes en restaurantes, bares o comedores medianos. Su diseño permite colocar las cestas con la vajilla sucia en una mesa de entrada, bajar la cúpula, y en pocos minutos tener toda la carga limpia y lista para aclarar o guardar.

Ventajas principales:

• Buena capacidad: puede lavar gran cantidad de platos y utensilios por ciclo.
• Diseño compacto: se adapta bien a cocinas con espacio limitado.
• Fácil uso y mantenimiento: el manejo es sencillo y el acceso a las piezas de limpieza es cómodo.
• Eficiencia: consumen menos agua que otros modelos de mayor tamaño.

Ideal para: Restaurantes medianos, bares con cocina, pequeños hoteles o comedores donde se realicen varios lavados al día, pero sin un flujo continuo de vajilla.

El lavavajillas de arrastre, en cambio, está pensado para cocinas de gran volumen. En lugar de lavar por ciclos, funciona de forma continua: las cestas o bandejas con la vajilla sucia entran por un extremo, pasan por las zonas de lavado y aclarado automáticamente, y salen limpias por el otro lado.

Ventajas principales:

• Alta productividad: permite lavar grandes cantidades de vajilla sin interrupciones.
• Automatización: requiere menos manipulación por parte del personal.
• Ahorro de tiempo: mantiene un flujo de trabajo constante, ideal para horas punta.

Ideal para: Hoteles, hospitales, comedores colectivos, grandes restaurantes o empresas de catering con un volumen muy alto de lavado diario.

Antes de decidirte por un modelo u otro, merece la pena analizar algunos puntos clave:

1. Volumen de lavado diario
   Si lavas cientos de platos al día de forma continua, el lavavajillas de arrastre es la mejor opción. Si los lavados se hacen por tandas, el de cúpula cubrirá tus necesidades sin problema.
2. Espacio disponible en la cocina
   Los lavavajillas de arrastre requieren una zona amplia y bien ventilada. En cocinas más pequeñas, un modelo de cúpula es más práctico y fácil de instalar.
3. Presupuesto y costes operativos
   El lavavajillas de arrastre supone una inversión inicial mayor, aunque a largo plazo puede resultar rentable si se aprovecha su alta capacidad.
4. Personal disponible
   Si cuentas con un equipo reducido, la automatización del modelo de arrastre puede ayudarte a optimizar tiempos y esfuerzos.

Ambos tipos de lavavajillas industriales son excelentes soluciones, pero cada uno está diseñado para un tipo de negocio distinto.

Si tu cocina maneja un volumen medio de lavado y quieres un equipo eficiente, compacto y fácil de mantener, el lavavajillas de cúpula será tu mejor aliado. Si, por el contrario, necesitas una máquina capaz de trabajar sin descanso en servicios de gran volumen, el lavavajillas de arrastre es la opción más adecuada.

Si aún tienes dudas, en Servitecni24 te ayudamos a elegir el lavavajillas que mejor se adapte a tu negocio, además de encargarnos de su instalación, mantenimiento y reparación en Madrid y Toledo.

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Image by Leonardo AI